Queremos enseñar que los gigantes mundiales de la moda no pueden robar impunemente diseños ni violar derechos como parte de su modelo comercial. Alentamos a las empresas para que emprendan la batalla” por lo que consideran plagios de sus obras.
La empresa, con base en Copenhague y presencia en 15 mercados internacionales, acusó a Zara de copiar los diseños de sus impermeables, acudiendo a los tribunales en 2016 y pidiendo a la multinacional de Amancio Ortega que dejará de vender los productos supuestamente plagiados.